Editorial n.º 42

Los musulmanes tenemos en la enseñanza profunda del Din del Islam un elemento que sería de gran ayuda que pusiéramos en práctica a menudo. Me refiero a la reflexión. Ese momento donde nos paramos y analizamos una situación, para no actuar de forma atropellada, y tomamos las decisiones más convenientes basadas en las enseñanzas que nos han sido trasmitidas.

La reflexión, tanto en privado como en compañía, es un bien preciado en vías de extinción que debemos recuperar como uso habitual. Y el uso de esta acción, que en apariencia tiene connotaciones pasivas, debe ser la base sobre la que se asienten las acciones futuras y una toma de decisiones firmes.

La situación de los musulmanes en Occidente merece una profunda reflexión. Los diversos atentados ocurridos los últimos meses tanto en Francia como en Bélgica, los mantras habituales como el “terrorismo islámico” y, en general, una campaña en los medios de comunicación para desacreditar a los musulmanes y al Islam nos han colocado en una situación realmente compleja.

Es habitual encontrar a multitud de tertulianos “exculpando” a los musulmanes, justificando nuestra posición y aclarando una y otra vez que no tenemos nada que ver con estos actos terroristas. Parece inevitable la intervención en este escenario, pero quiero compartir una reflexión sobre la parálisis de acción real que esta situación está provocando en la comunidad musulmana.

Hemos sido encasillados dentro del apéndice de “religiosos” y se nos pide que actuemos y que respondamos como clérigos. Sin embargo, nuestro anhelo es el ‘amal, es la acción, y quizá haya llegado el momento de reflexionar sobre las acciones que se nos está demandando como musulmanes y, al mismo tiempo, como europeos y como gente de este tiempo.

Reflexiones sobre las acciones que este momento histórico nos demanda, bajo el paraguas de la legalidad del derecho internacional y con la presencia activa en instituciones y organismos. Creo firmemente que tenemos soluciones a los problemas de nuestra sociedad y una alternativa más que viable, el Din del Islam.

Pido a Allah que nos dé certeza y una intención correcta. Amín.

Assalamu aleikum

Malik A. Ruiz

Director

Salir de la versión móvil