Por las jóvenes que han sembrado las semillas

Palabras de la directora de la Madrassa Sharif Al Wazzani acerca de la última parte del curso

Tras seis extraordinarios meses en Marruecos, llegó para las chicas el tiempo previsto en Inglaterra. Vinieron frescas y descansadas al haber pasado varios días junto a sus familias. La experiencia en Marruecos tuvo sus dificultades, pero fue también muy dulce; significó el momento de romper todas las normas a las que habían estado acostumbradas. Durante la estancia, se podía distinguir atributos del Corán puestos en práctica por las jóvenes mujeres. Lo que observé fue algo similar a lo que uno percibe en el Hajj, una purificación. Todo, sin poder remediarlo, sale fuera. Nada que estuviese en desacuerdo con el estudio del Corán tenía permitido permanecer escondido. Esto fue una gran sorpresa para todas nosotras, hubo que hacer frente a cada situación según iba surgiendo. Aun así, Allah nos lo puso fácil, ya que todas las jóvenes gozaban de un gran deseo por estar allí, lo que determinó el entendimiento de por qué sus padres eligieron este camino y el hecho de que ahora lo hayan tomado ellas mismas.

Al acceder a la mezquita y percibir el murmullo de la recitación del Corán que la recorre durante cada mañana, nadie puede obviarlo y no es posible negar que una nueva dimensión ha sido incorporada. El corazón abierto y la mente dispuesta de las muchachas han hecho favorable el estudio de Sira, Fiqh e Inglés, además de la continuación del aprendizaje de la Lengua árabe, poniendo en orden todo lo que habían adquirido en Marruecos. Asimismo, al ser la primavera el momento del año más bello en Inglaterra, se ha hecho propicio el que las chicas disfruten dando paseos y descubriendo los lugares históricos de la ciudad de Norwich.

Acciones como la cortesía y el servicio que las chicas han ofrecido a sus huéspedes, la puesta en práctica de lo aprendido, haciéndolo parte de sus vidas, y el reconocimiento de la gente de conocimiento de las que han estado rodeadas son las cosas que más me han impresionado. He podido ver claramente que el deseo de aprender de las muchachas devuelve el ‘Ilm (conocimiento) a la vida de esas sabias personas con las que Allah nos ha bendecido. De esta manera, aumenta su luz y da un verdadero significado a su saber. Debemos beneficiarnos de ello mientras estén aquí porque uno no sabe cuánto tiempo estarán entre nosotros. De igual manera, transmitirles esta intención a nuestro hijos, no para que lo tomen como una carga, sino como una aventura y un disfrute.

Hay una última cosa que me gustaría añadir, mencionada por Imam Az-Zarnuji en su libro Instrucción del estudiante. El método de aprender: “Sadid al-Din-Shirazi solía decir: ‘Nuestros mayores anunciaron que quien desee que su hijo sea culto tiene que visitar eruditos, apreciarlos y, además, ofrecerles remuneración. Si llevamos esto a cabo y nuestro hijo no llega a ser culto, nuestro nieto sí lo será”. Todos debemos esforzarnos para que esto suceda, ya que la educación de nuestros hijos es una de las cosas más importantes a la que tenemos que enfrentarnos

Pido a Allah que nos conceda continua protección y éxito en las cosas que Le complacen. Y que emerjan de entre nosotros mujeres de luz y conocimiento, siendo un regalo y un beneficio para los musulmanes en cualquier situación en la que se encuentren. Y doy las gracias a Allah por el regalo del Islam y del Profeta Muhammad (s.a.w.s).


(Traducido del inglés por Asisa Nieto)

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