Turquía abolió definitivamente este martes la prohibición de que las mujeres lleven velo en la administración pública, una medida impulsada por el primer ministro Recep Tayyip Erdogan y percibida por la oposición como un ataque a la laicidad.
«Hemos abrogado hoy una disposición arcaica, que iba contra el espíritu de la República», dijo Erdogan en el Parlamento ante los diputados de su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP).
La liberalización del uso del velo es una reivindicación emblemática del islam político en Turquía desde hace décadas.
El jefe del Gobierno -cuya mujer, al igual que la mayor parte de las esposas de los dirigentes de su partido, lleva velo-, habló de reforma «histórica» y señaló que «la República (turca) es la República de 76 millones de habitantes en Turquía».
«Las mujeres que llevan velo son miembros plenos de esta República», añadió.
La norma, que entró este martes en vigor tras ser publicada en el boletín oficial, forma parte de un paquete de medidas que amplía los derechos de las minorías en general, y que incluye nuevas reglas sobre la vestimenta de los funcionarios, entre ellas la autorización para que los hombres porten barba.
La anterior norma, redactada en 1982, obligaba a las mujeres a acudir al trabajo con «la cabeza descubierta» y a los hombres a ir cuidadosamene afeitados.
«Termina por fin un periodo oscuro», insistió Erdogan, quien consideró que la prohibición del velo violaba libertades esenciales.
Fuente: AFP